Los masajes VIP en Argentina son producto de una larga evolución de estas técnicas en el transcurso de la historia. Durante siglos, en todas las civilizaciones, los masajes tuvieron cultores que los pusieron entre los mejores cuidados para la salud.
Desde tiempos inmemoriales hasta hoy, se fueron descubriendo las múltiples ventajas de los masajes para la salud y el tratamiento de enfermedades. Pueden ser tanto preventivos (para evitarnos padecimientos futuros) como terapéuticos (cuando ya se ha presentado una dolencia).
Pasó en todas las civilizaciones antiguas. Siempre las diversas técnicas de masajes fueron de gran interés médico y científico. Y se perfeccionaron hasta ser como las conocemos hoy.
Los pioneros indios (lejos de los masajes VIP en Argentina)
Allá por el año 1800 aC, en la India, sabían de la importancia y utilidad de los masajes para el bienestar. De esos remotos años proviene uno de los libros de medicina más antiguos de la humanidad: el Ayurveda. En él hay referencias a los masajes. Y se introducen términos como el de fricción y frotación para mantener un cuerpo saludable. De hecho, los conocidos masajes “Ayurveda” derivan de allí.
Grecia
La enorme importancia que le daban los antiguos griegos a la estética y a los deportes, tuvo en los masajes un gran aliado. En los gimnasios griegos, que eran una parte crucial de la educación de los jóvenes y no un mero complemento, había sectores para qué expertos untaran y frotaran con aceites aromáticos los cuerpos de los estudiantes-atletas.
Los padres de la medicina occidental, como Hipócrates, ya unos 500 años aC. aconsejaban ejercicio y masaje como método terapéutico. Señalaban ventajas y contraindicaciones del masaje sobre las articulaciones. Daban recomendaciones sobre cómo debían realizarse las frotaciones, fricciones y demás movimientos.
Los masajes VIP en Argentina tiene una larguísima historia detrás
Roma
Durante la República y el imperio romano, los masajes fueron parte de las costumbres de todas las clases sociales. Es que con sus invasiones a Egipto y Grecia, los romanos pudieron conocer y absorber los conocimientos terapéuticos de ambas civilizaciones.
Uno de los mayores y más conocidos difusores de estas modalidades, fue Galeno (199-129 a.C.). Fue uno de los médicos más importantes de la historia. Él se trasladó a Roma para ser el médico personal de Marco Aurelio, y recopiló en varios tratados sus investigaciones sobre el ejercicio y el masaje. Clasificó el masaje en tres modalidades: firme, suave y moderado. Así sistematizó nueve formas de masajes, al combinar estos estilos, redactando las indicaciones precisas.
Medio oriente
En la antigua Mesopotamia se estilaba el uso de una amplia variedad de ungüentos para masajes. Provenía de la mezcla cultural que se dio en la península árabe a partir del año 3500 a.C. cuando las culturas sumeria, asiria y babilónica se ubicaron allí.
Avicena Abu Alí Al-Hussayn Ibn Siná (979 – 1037 d.C.) fue el médico más relevante del Imperio Árabe. Y escribió el libro “Canon de la Medicina”, que reconoce al masaje como método para conseguir un mayor bienestar. Habla de “sustancias nocivas” que se acumulan en los músculos después del ejercicio, y pueden eliminarse con masajes, que también aliviarán el cansancio.